No es que se vaya a caer el avión, pero si se advierte antes de que el vuelo comience, por algo será. La posibilidad de que un terminal provoque interferencias en momentos clave que distraigan a los pilotos está ahí. No obstante, la IATA -Asociación Internacional del Transporte aéreo, en sus siglas en inglés- sólo reporta un caso de interferencias por cada 238.000 vuelos internacionales.
Ya estamos más que habituados a apagar nuestro teléfono móvil cada vez que montamos en un avión, y a hacer lo propio con el portátil si se trata de las maniobras de aterrizaje o despegue. El porqué: las interferencias que provocan dichos dispositivos, y que pueden resultar a ser fatales para nuestra seguridad.
Foto cortesía CNN en español. |
¿Entonces? El problema es que durante las fases críticas del vuelo –aterrizaje y despegue- las interferencias pueden afectar al sistema de navegación y causar distracciones a los pilotos, que necesitan el 100% de concentración para realizar estas tareas. De hecho, una encuesta de la IATA revela que al menos uno de cada tres viajeros reconoce haber dejado encendido el móvil durante un vuelo comercial. Y es más: entre 2003 y 20009 se registraron 75 casos de interferencias en vuelos causadas por dispositivos electrónicos, de las cuales 29 correspondían a teléfonos. En resumidas cuentas: un incidente por cada 283.000 vuelos.
Que cada cual extraiga sus propias conclusiones…
Fuente: 20minutos.
0 comentarios:
Publicar un comentario